Femenino Rural.- La sequía y la desertificación, en clave femenina. Es la idea en torno a la que gira la campaña de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD) que lleva por lema en castellano ‘Mujer. Sus tierras. Sus derechos’. Difundida como #HerLand en inglés, la iniciativa subraya la desigualdad de género en el acceso a la tierra; conciencia sobre el especial impacto de la desertificación, la degradación de la tierra y la sequía en las mujeres y las niñas y sus barreras en la toma de decisiones sobre la tierra; y destaca las contribuciones de las mujeres a la gestión sostenible de la tierra al tiempo que promueve los derechos sobre la tierra de mujeres y niñas a nivel mundial. 

Se calcula que las sequías podrían afectar a más de las tres cuartas partes de la población mundial para el año 2050

Según datos de la ONU, la concurrencia y duración de las sequías ha aumentado un 29 % desde el año 2000. Actualmente, hay más de 2.300 millones de personas en todo el mundo que sufren problemas de escasez de agua, y se calcula que las sequías podrían afectar a más de las tres cuartas partes de la población mundial para el año 2050. Por otro lado, la desertificación es una amenaza para los ecosistemas al suponer una disminución de la productividad de los suelos y una pérdida de capacidad para albergar biodiversidad y capturar dióxido de carbono. A consecuencia de todo ello, la ONU calcula que, al ritmo actual, el 90% de los suelos podrían estar degradados en 2050.

Pese a que casi la mitad de la mano de obra agrícola global está formada por mujeres, sólo una de cada cinco son propietarias de tierras

Por su parte, en lo que se refiere a este vínculo con respecto a la desigualdad de género, el estudio de la ONU “Los efectos diferenciados de la desertificación, la degradación de las tierras y la sequía en las mujeres y los hombres” calcula que, a pesar de que casi la mitad de la mano de obra agrícola a nivel global está formada por mujeres, en todo el mundo, sólo una de cada cinco de ellas son propietarias de tierras. En esta línea, el estudio afirma que la desigualdad es mayor en aquellos países donde se sigue negando el derecho a las mujeres a heredar los bienes de sus maridos debido a leyes y prácticas regidas por costumbres, por tradición o por cuestiones religiosas.

Según el mismo documento, el hecho de no contar con títulos de propiedad de la tierra que puedan utilizarse como garantía, dificultan el acceso de las mujeres a los préstamos, al crédito y a la posibilidad de mejorar su formación. Además, esto les resta reconocimiento como agricultoras y aumenta el rechazo social a su participación en determinadas actividades agrícolas, lo que también puede provocar su exclusión de los espacios de toma de decisiones y menor presencia en puestos de responsabilidad.

Por todo lo anterior, el informe concluye que las mujeres se ven más afectadas que los hombres por fenómenos como la desertificación y la sequía, porque cuentan con menos herramientas para responder a sus efectos en lo referente a las variedades de cultivos, a las tecnologías de riego y a las distintas técnicas agrícolas a emplear según la situación.

En España, el 74% del territorio es susceptible de sufrir desertificación y un 20% de esas tierras se consideran ya degradadas

En España, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) aprobó el pasado año la Estrategia Nacional de Lucha contra la Desertificación (ENLD), en el marco del fortalecimiento de las sinergias con las políticas de desarrollo rural, de protección de la biodiversidad y reconocimiento de servicios ambientales. Este documento establece un marco de actuación para el desarrollo de políticas y actuaciones relacionadas con esta problemática en nuestro país, donde el 74% del territorio es susceptible de sufrir desertificación y un 20% de esas tierras se consideran ya degradadas. Entre los principios orientadores de esta Estrategia se destaca la inclusión de la perspectiva de género en todos los niveles de toma de decisiones y en las actividades de capacitación técnica, extensión y sensibilización relacionadas con la lucha contra la desertificación, en particular en los territorios con dinámicas de despoblación.

Vídeo de la campaña #HerLand de la UNCCD (Configurar los subtítulos para leerlo en español)

La Fundación Biodiversidad del MITECO apoya proyectos e iniciativas que contribuyen al cumplimiento de esta Estrategia, a través de la convocatoria de ayudas para el impulso de la investigación en materia de biodiversidad, correspondiente a 2022, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.

Proyecto ATLAS: Un mapa de la desertificación en España

Así, el proyecto ATLAS, liderado por la Universidad de Alicante, está elaborando un atlas de la desertificación en España, como base de las actuaciones a llevar a cabo en la ENLD y la implementación de la Neutralidad de la Degradación de Tierras en España.

“Estudio de la dinámica espaciotemporal de la desertificación en el sudeste de la Península Ibérica”


«La sequía en Alicante» by Suso Sinmiedo is licensed under CC BY 2.0

Por otro lado, el “Estudio de la dinámica espaciotemporal de la desertificación en el sudeste de la Península Ibérica” (DESFUTUR), coordinado por la Universidad de Córdoba, se ocupará de caracterizar las dinámicas de tres impulsores clave de la desertificación en un gradiente de aridez: el decaimiento forestal, los incendios forestales y las invasiones biológicas.

“Análisis y vigilancia de la aridez climática en España”

Finalmente, el proyecto “Análisis y vigilancia de la aridez climática en España” (ARIDESP), impulsado por la Estación Experimental de Aula Dei – Consejo Superior de Investigaciones Científicas (EEAD-CSIC), servirá para mejorar el conocimiento actual sobre la aridez climática en España, su evolución reciente y su proyección futura en un contexto de cambio climático, así como desarrollar herramientas de información que permitan monitorizar su evolución en tiempo real.

Nota: Las imágenes forman parte de la campaña #HerLand de UNCCD

Fuente: Fundación Biodiversidad