Fenómenos meteorológicos extremos como olas de calor, sequías, inundaciones, temporales y nevadas; especies invasoras; o intensificación de enfermedades. Así nos afecta el cambio climático. En España, las consecuencias son múltiples y graves, al ser uno de los países más vulnerables de Europa al cambio climático. Greenpeace, en un reciente informe en el que evalúa los efectos sobre el medio ambiente y la sociedad, alerta de algunas de ellas:
El 20% de la Península Ibérica es desierto. El 75% del territorio está en riesgo de convertirse en un desierto a finales de siglo. Siete de las diez cuencas hidrográficas con mayor sequía crónica de Europa se encuentran en España.
Producciones tradicionales como la vid y el alcornoque ya están siendo afectadas por el incremento de la temperatura.
La subida del nivel nivel del mar, se prevé que 4 mm cada año, provocará la pérdida de playas en el Cantábrico y zonas bajas costeras, deltas del Ebro, Llobregat, Manga del Mar Menor y costa de Doñana, entre otros.
También conllevará daños en las infraestructuras, con pérdidas en el sector turístico. Los destinos de nieve serán también los más vulnerables. Las pernoctaciones en España se reducirán un 96% en 2080.
Se prevé un aumento de la mortalidad anual en 10.000 al año frente a las 1.300 actuales por las olas de calor en 2.100. Aparecerán nuevas alergias y dermatitis atópicas por la contaminación. Habrá mayor número de enfermedades tropicales en España por la proliferación del mosquito tigre y la garrapata. Se agravarán las enfermedades cardiovasculares y respiratorias por extremos térmicos y se producirán 30.000 muertes prematuras cada año.
La de los Pirineos es la única cordillera en todo el planeta donde la extinción de su hielo glaciar se producirá en una generación: la nuestra.
En lo que afecta a la biodiversidad, el 50% de anfibios, reptiles, mamíferos y aves de nuestro país podrían ver reducido su hábitat de distribución actual en más de una tercera parte.
Los fenómenos atmosféricos son cada vez más frecuentes e intensos y en los años venideros se prevé que se multipliquen si no se pone freno al calentamiento global. Para evidenciar estos efectos, Greenpeace ha recopilado imágenes que los visibilicen, datos que los corroboren y testimonios de la comunidad científica que dan cuenta de primera mano de los problemas y sus repercusiones.
Los escenarios de futuro son preocupantes, tanto por sus consecuencias en el medio ambiente como en la sociedad. El cambio climático tiene un impacto que irá en aumento sobre la gran mayoría de los sectores productivos como el turismo, la agricultura y la producción de alimentos. También se notará en el mercado inmobiliario, la industria o la generación de electricidad, entre otros.
“Tendemos a pensar que el cambio climático es un problema lejano, casi ajeno, pero no es así. Debemos concienciarnos sobre él antes de que sea irreversible. Ese es el objetivo de este análisis”, advierten desde Greenpeace.
A continuación, el informe completo: